Las empresas y los gobiernos utilizan Internet para espiarnos
Nuestra creciente dependencia de Internet y de la tecnología inteligente significa que somos más observados que nunca.
¿Es eso algo contra lo que luchar, o nuestro concepto de privacidad ha quedado obsoleto?
¿Deberíamos preocuparnos?
Los informes sobre la muerte de la privacidad no son nada nuevo. En 1890, impulsados por la «profunda aversión a las invasiones de la privacidad social» que hicieron posible las cámaras Kodak, los abogados estadounidenses Brandeis y Warren escribieron un influyente tratado llamado El Derecho a la Privacidad que intentaba delimitar la frontera entre las esferas personal y pública.
Para la mayoría de nosotros, un cierto grado de privacidad es importante, incluso si nos cuesta decir por qué. «La privacidad está lejos de estar muerta», dice la antropóloga digital Krueckeberg.
«Es una necesidad existencial, una condición en la que nos sentimos cómodos y seguros.»
Las invasiones digitales
En la era de Internet, las invasiones de la privacidad vienen de dos direcciones principales.
- En primer lugar, grandes partes de la web han sido diseñadas por empresas comerciales para controlar cada uno de nuestros movimientos en línea en nombre del beneficio. Google, Facebook y similares ganan miles de millones vendiendo publicidad dirigida a deseos que ni siquiera sabemos que tenemos.
- En segundo lugar, los gobiernos y otros organismos públicos han comenzado a aprovechar las herramientas de vigilancia masiva que ofrece Internet en nombre de una mejor seguridad pública.
Podemos argumentar que todos podemos elegir si aceptamos o no la vigilancia. Si lo hacemos, nuestra recompensa son mejores servicios, ya sea mejores resultados de búsqueda o recomendaciones más relevantes.
En la práctica, sin embargo, las posiciones casi monopolísticas de algunas grandes empresas de tecnología hacen que sea muy difícil para nosotros evitar darles nuestros datos personales, y sólo tenemos un control muy rudimentario sobre cómo.
Sí, definitivamente debería importarnos
¿Estamos de acuerdo con todas las leyes y todas las leyes propuestas? ¿Cuáles son nuestros sentimientos sobre la IA?
Es importante tener hábitos privados porque a algunas personas les puede disgustar mucho lo que están haciendo hoy y que podrán ser de consulta pública dentro de 10 años, y eso es imposible de predecir.
Esto es lo que nos parece tan frustrante de las personas que dicen que no hay razón para preocuparse por la privacidad. Porque no tenemos idea de cómo este material será utilizado contra nosotros por algún grupo futuro por personas con juicios morales futuros.
La gente anda por ahí tratando de arruinar la vida de extraños por cosas bastante menores realizadas en los años 80, lo que solo se considera un gran problema hoy en día. Ahora que todos nuestros pensamientos y gastos están documentados, ¿qué opciones inocuas hoy se tomarán contra nosotros mañana?
